miércoles, 11 de noviembre de 2015

¿Qué es la Drogadicción?

La adicción es una enfermedad crónica del cerebro, a menudo con recaídas, caracterizada por la búsqueda y el consumo compulsivo de drogas a pesar de las consecuencias nocivas para la persona adicta y para los que le rodean. Si bien es cierto que en el caso de la mayoría de personas la decisión inicial de tomar drogas es voluntaria, con el tiempo los cambios que ocurren en el cerebro de las personas adictas pueden afectar el auto control y obstaculizar su habilidad de resistir los impulsos intensos de consumir drogas.

¿Qué son las drogas?

Una droga es una sustancia que puede modificar el pensamiento, las sensaciones y las emociones de la persona que la consume.Las drogas tiene la capacidad de cambiar el comportamiento y, a la larga, la manera de ser.
Algunas drogas se consideran legales y otras, ilegales. La consideración de un tipo de droga como legal (como sucede con el alcohol o el tabaco) implica tan solo una regulación diferente de la producción y de la comercialización, y en ningún caso quiere decir que no sea peligrosa.
Todas las drogas comportan un riesgo y no existe consumo alguno que pueda considerarse totalmente seguro. El riesgo resulta de la combinación de tres factores: los efectos que provoca la sustancia, la manera de utilizarla (dosis, forma de administrarla, efectos que quieren obtenerse con ella) y la vulnerabilidad del consumidor.

¿Qué le pasa al cerebro cuando se usan drogas?

Las drogas contienen sustancias químicas que infiltran el sistema de comunicación del cerebro perturbando el envío, la recepción y el procesamiento normal de información entre las células nerviosas. Hay por lo menos dos maneras que las drogas pueden hacer esto: 1) imitando los mensajeros químicos naturales del cerebro y 2) sobreestimulando el “circuito de gratificación” del cerebro.
Algunas drogas como la marihuana y la heroína tienen una estructura similar a la de ciertos mensajeros químicos llamados neurotransmisores, que el cerebro produce de manera natural. Esta semejanza permite a las drogas “engañar” a los receptores del cerebro y activar las células nerviosas para que envíen mensajes anormales.
Otras drogas, como la cocaína o la metanfetamina, pueden hacer que las células nerviosas liberen cantidades excesivamente altas de los neurotransmisores naturales (especialmente la dopamina) o pueden bloquear el reciclaje normal de estas sustancias químicas en el cerebro, lo cual es necesario para cortar el envío y la recepción de las señales entre las neuronas. El resultado es que el cerebro queda saturado de dopamina. La dopamina es un neurotransmisor que se encuentra en las regiones del cerebro que controlan el movimiento, las emociones, la motivación y las sensaciones placenteras. Normalmente, el sistema de gratificación responde a los comportamientos naturales relacionados con la sobrevivencia (como comer, pasar tiempo con los seres queridos, etc.), pero cuando es sobreestimulado por las drogas psicoactivas produce efectos eufóricos. Esta reacción inicia un ciclo vicioso de refuerzo que “enseña” a las personas a repetir el comportamiento de abuso de drogas que causó la gratificación.
Cuando una persona continúa abusando de las drogas, el cerebro se adapta a estas oleadas abrumadoras de dopamina produciendo menos dopamina o disminuyendo el número de receptores de dopamina en el circuito de gratificación. El resultado es un menor impacto de la dopamina sobre el circuito de gratificación, lo que limita el placer que el usuario es capaz de derivar no sólo de las drogas, sino también de acontecimientos en su vida que anteriormente le causaban placer. Esta disminución en el placer obliga al drogadicto a continuar abusando de las drogas en un intento de recuperar la función normal de la dopamina. Además, ahora necesita consumir una cantidad mayor de la droga en un intento de elevar la función de la dopamina a su nivel normal inicial. Este efecto se conoce como tolerancia.

Hablar de tipos de drogas es hablar de categorías. Y agrupar lo que sea en categorías implica utilizar uno o más criterios para ello. Criterios hay tantos como gustos, pero por suerte, en drogas, hay algo de consenso en cuanto a qué criterios seguir para clasificar las sustancias llamadas drogas. Según la clasificación que  utilicemos  nos relacionaremos con las drogas, ya sea con las sustancias en sí mismas o con los temas de debate y estudio que surgen de las mismas.
La primera clasificación que a muchas personas les viene a la mente esta relacionada con la legalidad. Esto haría una clasificación simple de legales e ilegales, aunque visto el ritmo de aparición de nuevas sustancias podríamos incluir la categoría de alegales.
Cada cultura tiene sus drogas “legales” e “ilegales”, y los motivos de que una y no otra sea legal o ilegal no suelen tener mucho sentido. Como ejemplo cercano en lo referente a las diferencias en los usos de drogas por cultura, tenemos a los países de mayoría musulmana, donde el alcohol está prohibido y en cambio el consumo de cannabis se tolera. En los países occidentales suele ocurrir al contrario, el alcohol está permitido y promocionado mientras que los productos del cannabis están perseguidos.

" Las drogas no liberan. Las drogas divierten, deshiniben, animan, deprimen, provocan distensión... Pero no liberan." 



1 comentario:

  1. Buena información !
    sobre lo que son las drogas y como hacen daño en tu salud, muy buena, esperare tus actualizaciones :)

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